La leyenda de Rómulo y Remo es una de las historias más famosas de la antigua Roma. Cuenta la historia de dos hermanos gemelos que fueron abandonados en el río Tíber y luego fueron criados por una loba. Estos hermanos, Rómulo y Remo, se convirtieron en los fundadores de la ciudad de Roma. Pero, ¿quién fue el padre de Rómulo y Remo? En este artículo, exploraremos la historia de Marte y Rea Silvia, los padres de estos legendarios gemelos.
La leyenda de Rómulo y Remo
El nacimiento de los gemelos
Según la leyenda, Rómulo y Remo eran hijos de Marte, el dios de la guerra, y Rea Silvia, una sacerdotisa virgen. La historia cuenta que Rea Silvia fue elegida para ser la sacerdotisa de Vesta, la diosa del hogar y la familia. Como sacerdotisa, se le prohibió tener hijos y se le pidió que permaneciera virgen.
Abandonados en el río Tíber
A pesar de las restricciones impuestas a Rea Silvia, Marte se enamoró de ella y juntos concibieron a Rómulo y Remo. Cuando el rey Amulio, hermano de Rea Silvia, se enteró del embarazo de su hermana, temió que los hijos fueran una amenaza para su reinado. Por lo tanto, ordenó que los gemelos fueran abandonados en el río Tíber.
La loba Luperca los amamanta
Los gemelos fueron colocados en una cesta y dejados a la deriva en el río. Sin embargo, la fortuna estuvo de su lado, ya que la cesta llegó a la orilla y los gemelos fueron encontrados por una loba llamada Luperca. La loba los amamantó y los cuidó como si fueran sus propios cachorros.
La fundación de Roma
A medida que Rómulo y Remo crecían, se convirtieron en jóvenes fuertes y valientes. Un día, descubrieron su verdadera identidad y decidieron vengarse de su tío Amulio y restaurar el trono a su abuelo Numitor. Con la ayuda de un grupo de seguidores, Rómulo y Remo derrocaron a Amulio y liberaron a su abuelo.
Después de restaurar a Numitor como rey, los gemelos decidieron fundar su propia ciudad en el lugar donde habían sido encontrados por la loba. Sin embargo, surgieron diferencias entre ellos sobre el lugar exacto donde se construiría la ciudad. Rómulo quería fundarla en el monte Palatino, mientras que Remo prefería el monte Aventino.
Para resolver la disputa, los gemelos acordaron observar las señales de los dioses. Cada uno se posicionó en su monte y esperó a que los dioses les enviaran una señal. Remo vio primero seis buitres volando sobre su cabeza, pero Rómulo vio doce. Esto llevó a una discusión y, finalmente, a una pelea entre los hermanos. Rómulo mató a Remo y se convirtió en el único fundador de la ciudad de Roma.
Los padres de Rómulo y Remo
Marte, el dios de la guerra
Marte, el dios de la guerra, fue el padre de Rómulo y Remo. En la mitología romana, Marte era considerado el dios de la guerra y la virilidad. Era hijo de Júpiter y Juno, y hermano de Vulcano y Minerva. Marte era adorado por los romanos como el protector de la ciudad y el líder de los ejércitos.
Rea Silvia, la sacerdotisa virgen
Rea Silvia, también conocida como Ilia, era la madre de Rómulo y Remo. Era hija de Numitor, el rey de Alba Longa, y hermana de Amulio. Rea Silvia fue elegida para ser la sacerdotisa de Vesta, la diosa del hogar y la familia. Como sacerdotisa, se le prohibió tener hijos y se le pidió que permaneciera virgen. Sin embargo, se enamoró de Marte y concibió a los gemelos.
La historia de Rómulo y Remo es una de las leyendas más famosas de la antigua Roma. Estos gemelos fueron abandonados en el río Tíber y criados por una loba. Con el tiempo, se convirtieron en los fundadores de la ciudad de Roma. Marte, el dios de la guerra, y Rea Silvia, la sacerdotisa virgen, fueron los padres de estos legendarios gemelos. Su historia es un símbolo de la fundación de Roma y el inicio de una de las civilizaciones más poderosas de la historia.